Sala Ruta de la Seda

En esta sala, destacada por sus vivos colores, la exposición está dedicada a la Ruta de la Seda, los caminos comerciales que, desde el siglo IV a.C. conectaban Europa con Asia y África siendo la seda, cuya invención se efectuó en China, el producto principal comercializado. Las transacciones comerciales que se producían entre los distintos países favorecieron un desarrollo y enriquecimiento en otros ámbitos como fueron la política, el arte o la religión.

 

La maqueta principal que puede verse en el centro de la sala está basada en la película homónima del año 1963: “55 días en Pekín” donde se representa la resistencia de los representantes de potencias europeas y de Japón ante los ataques de los bóxers, por lo que, debieron de refugiarse en el barrio de las embajadas de Pekín.

En el año 1900 varias potencias del extranjero pretendieron incrementar su poder colonialista en China. Tal propósito condujo al alzamiento de los que fueron denominados bóxers, sociedad secreta China de base antiimperialista y antijaponesa. Esta situación desembocó en la que fue llamada “Guerra de los Boxers”, en la cual, las potencias extranjeras abandonaron el intento imperialista en China.

55 días en Pekín

Las figuras que configuran la maqueta son de Trophy Miniatures, una marca que tuvo sus comienzos en el año 1970 y cuya fama es debida a la calidad del estilo Toy de sus piezas, es decir, las figuras están pintadas al estilo de los juguetes antiguos, con no demasiado realismo pero con gran gracia naif.

En esta sala, encontramos escenas de la vida cotidiana y acontecimientos históricos de otros países como Japón, China, India, Persia o Turquía. Entre las maquetas que pueden observar, cabe destacar la Procesión del Durbar, un gran desfile repleto de color, celebrado en 1903, para conmemorar la coronación del rey Eduardo VII y la reina Alejandra como Emperador y Emperatriz de la India.

El mercado de la India añade momentos de la vida cotidiana de este país en sus épocas coloniales.

En la sala se ha reservado un espacio para figuras de falleros y falleras conjuntamente a escenas de la vida cotidiana de los valencianos inmortalizadas en piezas manufacturadas por Alymer, o Mundiart.

La sala fue inaugurada en el año 2006 con la ocasión de la proclamación de la ciudad de Valencia como Capital de la Ruta de la Seda por la Unesco.